#ElManifiestoNoticias | El magnate republicano quedó inhabilitado para dirigir empresas a partir de ahora por un plazo de tres años, determinó el juez del caso
El expresidente de Estados Unidos Donald Trump deberá pagar 355 millones de dólares en el juicio por haber inflado el valor de su patrimonio, ordenó un juez de Nueva York.
El fallo también inhabilitó al republicano para dirigir negocios durante tres años, en un duro golpe a su imperio inmobiliario.
Por la presente, el Tribunal prohíbe a Donald Trump ejercer como funcionario o director de cualquier corporación de Nueva York u otra entidad legal en Nueva York durante un periodo de tres años”, escribió el juez Arthur Engoron en su sentencia.
Con su fallo, Engoron ordenó a Trump, a sus hijos y a la empresa familiar, el conglomerado Trump Organization, el pago de 354 millones 868 mil 768 dólares (seis mil 51 millones 967 mil 456 pesos mexicanos al tipo de cambio actual).
Trump y sus hijos Donald Trump Jr. y Eric comparecieron en un largo proceso civil de octubre a enero, acusados de haber inflado el valor de los activos de Trump Organization.
Según la acusación, la familia exageró en el valor del patrimonio con el fin de obtener más financiamiento de aseguradoras y mejores préstamos.
Su total falta de contrición y remordimiento roza lo patológico. Sólo se les acusa de inflar el valor de los activos para ganar más dinero”, afirmó el juez Engoron en su fallo.
Los acusados son incapaces de admitir su error. En su lugar, adoptan una postura de no ver el mal, no oír el mal, no hablar el mal que las pruebas desmienten”, agregó.
En respuesta, desde su propiedad Mar-a-Lago, en Florida, el magnate prometió apelar la decisión del juez, una medida que ya había adelantado su abogada defensora, Alina Habba.
Apelaremos”, dijo Trump, al tiempo que acusó al presidente Joe Biden de impulsar la acusación.
Previamente, en su red Truth Social, el expresidente acusó al juez Engoron de ser un “torcido” y a la fiscal general de ser “totalmente corrupta”.
También calificó el veredicto como una “interferencia electoral y caza de brujas”, cuando se perfila como el favorito a ganar la nominación republicana de cara a las presidenciales.
Alina Habba, por su parte, tildó el fallo de “injusticia manifiesta”.
Confiamos en que la Corte de Apelaciones anule este veredicto atroz y ponga fin a esta implacable persecución”, sostuvo.
Los dos hijos del republicano han sido condenados asimismo a pagar cuatro millones de dólares cada uno.
“ENORME VICTORIA”
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, celebró la sentencia.
Es una enorme victoria para quienes creen que todos estamos obligados a jugar con las mismas reglas, incluidos los expresidentes”, afirmó.
No importa lo grande, rico o poderoso que creas que eres, nadie está por encima de la ley”, aseguró.
James presentó esta demanda civil en 2022 alegando un presunto fraude financiero contra los miembros de la familia Trump por inflar el valor de su imperio inmobiliario, un conglomerado de empresas que incluye rascacielos, hoteles de lujo y campos de golf en todo el mundo durante la década de 2010.
Algunos activos, como la Torre Trump en la 5 Avenida de Manhattan, son emblemáticos del éxito del hombre de negocios que entró en política gracias a su imagen de constructor inmobiliario de éxito.
Antes del proceso, el juez Engoron, que llegó a amenazar durante el juicio con expulsar al magnate de las vistas, había dictaminado que se había cometido fraude.
El juez consideró que la fiscal general James, una demócrata elegida en las urnas, presentó pruebas concluyentes de que, entre 2014 y 2021, los acusados habían sobreestimado los activos del grupo.
Según la investigación, el valor era de 812 millones de dólares y fue inflado a dos mil 200 millones de dólares.
El republicano repitió durante el proceso que se trataba de un juicio “digno de una república bananera”.
En los próximos meses tendrá que sentarse en el banquillo para responder 91 inculpaciones criminales en Washington, Florida y Georgia, así como en Manhattan, donde el 25 de marzo está previsto el inicio de otro juicio.
Se trata del primer proceso por la vía penal a un expresidente estadunidense, por el pago de dinero en plena campaña electoral en 2016 a una actriz porno para comprar su silencio.