#ElManifiestoNoticias | Cuando la ciudad sagrada se levantaba tras la contingencia de covid-19, la guerra Israel-Hamás golpeó el comercio y el turismo, lo que afecta a los pobladores
La vieja ciudad de Jerusalén enfrenta el impacto que significa la guerra que libra Israel contra Hamás en la Franja de Gaza, cuyos efectos colaterales son la baja en la cantidad de peregrinaciones y turistas cristianos que la visitan año con año.
Tiendas cerradas y pocas personas en negocios o restaurantes se pueden observar en estos días durante un recorrido por la conocida Vía Dolorosa, donde se ofertan todo tipo de souvenirs y productos varios como telas, perfumes, muebles, joyería y alimentos de la región.
Hemos tenido pocas personas por la violencia de Hamás”, refiere el chef propietario del restaurante Roods, ubicado cerca de la entrada principal de la vieja ciudad amurallada.
La ciudad de Jerusalén representa un lugar sagrado para millones de personas en el mundo que profesan diversas religiones y era normal hasta hace unos meses escuchar el bullicio en sus callejones por la música y los gritos de los comerciantes que ofrecen sus productos, sin embargo, hoy es distinto.
En los últimos seis meses, los cerca de 800 negocios que aquí se encuentran vieron caer sus ingresos ante la falta de visitantes, en su mayoría familias que gustan de consumir los distintos productos que se ofrecen. Apenas lograban comenzar a revertir las pérdidas económicas que significó la pandemia de covid-19 cuando los atentados terroristas del 7 de octubre de Hamás y la posterior respuesta de Israel en Gaza avivaron el conflicto y tumbaron las condiciones de seguridad para recibir a más personas.
Dentro de Jerusalén se encuentra el llamado Muro de los Lamentos, lugar de rezo para los judíos que también puede observarse sin las grandes filas para ingresar. Esto mismo ocurre en la Basílica del Santo Sepulcro, dentro de la ciudad vieja, lugar que guarda en su interior lo que queda de la estructura sepulcral y el verdadero sepulcro vacío de Cristo.
En ambos espacios, son pocos los grupos que llegan para ingresar.
Según registros locales, en febrero pasado llegaron a Israel alrededor de 67 mil 500 turistas, casi un 80 por ciento menos que en el mismo periodo de 2023, mismo porcentaje menor a lo obtenido en 2019, previo a la pandemia de salud. La mayoría de los turistas que visitan Israel a través del Aeropuerto Internacional Ben Gurión lo hace para dirigirse a Jerusalén.
Esta baja en el turismo a Tierra Santa por el conflicto en Oriente Medio, lo mismo afecta a prestadores de servicios en pequeño que a dueños de restaurantes, personal de servicio, agencias de viajes, guías de turistas, aerolíneas y hoteles.
CREENCIAS
En Jerusalén se encuentra la iglesia del Santo Sepulcro, sitio especial para el cristianismo; además, ahí se halla la Cúpula de la Roca, sagrada para los musulmanes. En tanto, el Muro de los Lamentos es sitio bendito para los judíos en dicha ciudad.