#ElManifiestoNoticias | El tribunal determinó que, aunque es inusual que alguien parezca ebrio de inmediato tras consumir alcohol, no se podía concluir con certeza que el acusado estuviera ebrio.
Un tribunal en Daegu ha absuelto a un hombre de 60 años que enfrentaba cargos por conducir en estado de ebriedad, argumentando que no se pudo determinar si estaba bajo los efectos del alcohol mientras conducía. La decisión se tomó luego de que el hombre consumiera una botella de soju —licor de arroz— después de detener su automóvil, lo que dificultó precisar su nivel de intoxicación al momento de conducir.
El incidente ocurrió el 16 de septiembre cuando el conductor fue detenido por la policía en el distrito Jung-gu de Daegu a las 23:30 horas, tras haber recorrido 2.4 kilómetros. Al ser sometido a una prueba de aliento 40 minutos después, su contenido de alcohol en sangre (BAC) fue del 0.128%, muy por encima del límite legal en Corea del Sur. Según la ley surcoreana, un conductor puede ser castigado si su BAC es de 0.03% o más, y la licencia puede ser revocada si el nivel es de 0.07% o superior.
La complejidad del caso radica en el hecho de que, según los informes, el hombre consumió una botella entera de soju dentro de su automóvil inmediatamente después de estacionarse. Testigos señalaron que su comportamiento al salir del vehículo parecía errático y que se tambaleaba, lo que generó sospechas sobre su estado.
Sin embargo, el tribunal destacó que, aunque es inusual que alguien parezca ebrio de inmediato tras consumir alcohol, no se podía concluir con certeza que el acusado estuviera en estado de ebriedad al momento de conducir.
«Incluso si el acusado bebiera toda la botella de soju como afirmó, no está claro por qué aparecería ebrio inmediatamente después», señaló el tribunal en su veredicto. «Pero no podemos confirmar definitivamente que estaba ebrio mientras conducía basándose en tales evidencia circunstancial o especulación».
Los fiscales intentaron utilizar la fórmula de Widmark, una herramienta comúnmente empleada en Corea del Sur para estimar los niveles previos de alcohol en sangre. Este cálculo toma en cuenta factores como el tiempo transcurrido, el sexo, el peso y el consumo de alcohol. Sin embargo, el tribunal dictaminó que no había pruebas suficientes para demostrar de manera concluyente que el hombre estaba bajo los efectos del alcohol cuando conducía.
A pesar de la estimación realizada, la corte se inclinó por la falta de evidencia concreta y determinó que las pruebas presentadas eran circunstanciales. Algunos conductores en Corea del Sur han intentado socavar los resultados de las pruebas de alcohol bebiendo grandes cantidades de alcohol inmediatamente cuando son detenidos.
